Nuestra postura a la hora de dormir influye en nuestro descanso y existen diferentes opciones en las que podemos encontrarnos cómodos y dar con la posición en la que lograr un sueño reparador.
Una de las posturas más comunes es boca abajo, una opción que tiene varios pros y contras que debemos conocer.
Las ventajas de dormir boca abajo
Si escogemos para dormir como posición de descanso la de acostarnos boca abajo podemos beneficiarnos de algunos aspectos de esta postura.
En ocasiones es bueno dormir boca abajo, por ejemplo, si roncamos, ya que en esta posición conseguiremos reducir nuestros ronquidos, lo que nos ayudará a tener un sueño más profundo y a descansar mejor.
Al plantearnos como dormir boca abajo es importante contar con un colchón adecuado, que se adapte a nuestra figura y cuente con las características de transpirabilidad y regulación térmica que nos permita descansar.
Junto con el colchón también es esencial una almohada para dormir boca abajo que no nos moleste a la hora de apoyar la cabeza o los brazos y que nos permita respirar correctamente. Una almohada fina y con poca firmeza es la elección ideal para dormir en esta postura, para no forzar la posición de las cervicales durante el sueño.
Además, si optamos por esta postura al dormir, sentiremos más alivio en brazos y hombros, lo que puede hacer que sea una opción muy recomendada si sufrimos molestias en estas partes del cuerpo.
Por último, esta postura puede ser la que nos haga sentirnos más cómodos y nos ayude a conciliar antes el sueño, lo que puede hacer que sea la posición perfecta para nosotros y así conseguir dormir mejor.
Inconvenientes de dormir boca abajo
Dormir boca abajo puede tener algún inconveniente que puede hacer que no sea la opción más recomendada para todo el mundo.
Uno de los problemas de esta posición es que puede afectar a la postura de las cervicales si no contamos con la almohada adecuada, lo que hace que sea imprescindible tener una almohada adaptada para esta postura y evitar dolores y molestias.
Además, en el caso de personas que padezcan algún tipo de problema respiratorio, esta postura puede afectar al descanso al estar apoyados sobre el pecho y el estómago, dificultando la respiración y afectando al sueño.
Por último, otro de los inconvenientes de esta postura a la hora de dormir es que tendremos la cara apoyada durante toda la noche, algo que puede influir en la aparición de arrugas si dormimos boca abajo de forma habitual.
A pesar de estos posibles inconvenientes, no es una posición que implique ningún riesgo ni problema de salud a la hora de dormir, todo dependerá de nuestras circunstancias y del estado de nuestra almohada y nuestro colchón.
En definitiva, a la hora de dormir es importante encontrar la posición en la que estamos más cómodos, y boca abajo puede ser la solución con la que conseguir el descanso que necesitamos.
